Ya ha llegado el periodo de la declaración de la renta 2021. En estos tres meses del año que componen abril, mayo y junio, al igual que todos los años, se abre el plazo para presentar la declaración de la renta del año 2020.
Este es un trámite muy importante que, como contribuyente no debes obviar, ya que puede acarrear graves sanciones. Muchas personas siempre buscan pagar menos impuestos en la declaración, sin embargo, para lograr esto es necesario contar con la ayuda de un profesional en materia tributaria.
En el día de hoy queremos hablarte sobre todo lo que debes saber para que puedas realizar la declaración de la renta 2021 dentro de los plazos y sin contratiempos.
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¿Qué es la declaración de la renta?
Cuando hablamos de la declaración de la renta nos estamos refiriendo a un tipo de trámite que se realiza de forma anual. El plazo para presentar la declaración de la renta es el siguiente: del 7 de abril al 30 de junio.
Otras fechas de interés:
- Martes 4 de mayo: disponible la cita previa para la modalidad telefónica
- Jueves 6 de mayo: presentación por teléfono de la declaración
- Jueves 27 de mayo: disponible la cita previa para la modalidad presencial
- Martes 2 de junio: la Agencia Tributaria comienza a atender presencialmente a los contribuyentes
- Viernes 25 de junio: fin del plazo para las declaraciones con resultado a ingresar con domiciliación bancaria
- 29 de junio: último día para pedir cita previa
Este tipo de impuesto es más conocido como IRPF y a través de este se gravan todas las rentas que la persona haya obtenido durante el año anterior. No importa cuál sea el concepto de la renta, ya sea por sueldos y salarios, ingresos obtenidos como autónomo o cualquier otro, la persona está obligada a presentar la declaración de la renta 2021.
Este impuesto es progresivo y va a depender de la cantidad de ingresos brutos que se obtuvo en el periodo que se está declarando. En este 2021, este impuesto puede llegar hasta un 47% en el caso de que la persona haya obtenido un enriquecimiento de más de 300.000 euros.
Es importante destacar que todas las personas físicas residentes en España están en la obligación de presentar la declaración de la renta en los plazos establecidos. Esta declaración de la renta permite a la Administración Tributaria controlar de mejor forma las rentas de los ciudadanos y por supuesto, recaudar dinero para el estado.
Las retenciones y deducciones
Otra de las cosas que hay que tener en cuenta respecto a este tema es que no hay que pagar el monto del IRPF de un solo golpe. Por lo general, a aquellas personas que están bajo una dependencia laboral, es decir que son trabajadores empleados, se les descuenta mes a mes una parte que está destinada a este impuesto. Esto es algo “automático” que el empleador debe retener y abonar a la Agencia Tributaria.
Sin embargo, también hay que destacar que, hay algunos ingresos a los que, por su tipo, no se les aplica de forma inmediata y por lo tanto deben ser declarados al finalizar el periodo.
La declaración de la renta permite liquidar por completo el IRPF y esta declaración es donde se calcula con exactitud el monto a pagar. En el caso de que debas abonar algo, deberás hacerlo, ya sea en un pago único o en plazos. Pero, por el contrario, también puede ocurrir que al final del periodo hayas pagado más de lo que deberías, y en ese caso la Agencia Tributaria te devolverá la diferencia.
¿Quiénes y cuándo deben realizar la declaración de la renta?
No todos los contribuyentes están en la obligación de hacer la declaración de la renta, ya que existen algunos límites para que el contribuyente se vea en la obligación de hacerla o no.
En resumen y para simplificarlo, todo aquel contribuyente que haya obtenido un ingreso bruto de al menos 22.000€ en el periodo anterior está en la obligación de presentar su declaración de la renta 2021. Si es tu caso, debes hacerlo a partir del día 7 de abril hasta como máximo el día 30 de junio del presente año.
¿Cómo se hace el cálculo de la declaración de la renta 2021?
A pesar de que muchas personas piensan que este es un cálculo complejo, lo cierto es que es muy sencillo. Además, es algo bastante útil para que puedas calcular cuánto debes pagar con antelación. Intentaremos explicártelo de la forma más sencilla posible, solo tienes que seguir los pasos que te describimos a continuación.
- Debes empezar por sumar todos los ingresos brutos que has tenido durante todo el periodo fiscal. Por ejemplo, si eres empleado, debes sumar todas las nóminas del último año en bruto, es decir, sin restar las retenciones.
- Después tienes que restar los gastos deducibles, generalmente suelen estar alrededor de los 2.000 euros anuales. Sin embargo, pueden existir diferentes tipos de gastos que debes tener en cuenta.
- Ahora deberás restar el mínimo por contribuyente y demás reducciones o deducciones. Para una persona sin hijos este monto es de 5.500 euros. En el caso de que tengas descendientes menores de 25 años, puedes aplicar a una reducción dependiendo de la cantidad de hijos.
- Ahora debes calcular el porcentaje de cada tramo hasta que puedas llegar a tu base imponible.
Pongamos un ejemplo sencillo: Supongamos que ganas 37.000 euros anuales y no tienes pareja ni hijos. En este caso, debes descontar 5.500€ del mínimo personal y 2.000€ de otros gastos, por lo que tu base imponible será de 29.500€.
Ahora debes calcular cada tasa impositiva de cada tramo de la siguiente manera:
- Los primeros 12.450€ se multiplicarán por el 19% para un total de 2.365€.
- Luego tendremos 7.750€ correspondiente al tramo desde 12.450€ hasta 20.200€ que multiplicaremos por 24% lo que te dará un total de 1.860€.
- Para finalizar, tomaremos los siguientes 9.300€ restantes del tramo desde 22.200€ hasta los 29.500€. Esto lo multiplicaremos por el 30% y nos dará como resultado 2.790€.
- Sumaremos los 3 resultados y veremos que te tocará pagar un total de 7.015€
¿Qué ocurre si tenemos más de un pagador?
Por último, y no menos importante hacer un breve resumen de todas las dudas que surgen este año en base a los ERTE’S vs COVID
Es una creencia muy extendida creer que si hay 2 o más pagadores durante el año, la declaración de la renta va a salir a pagar más que si solo hubiera 1 pagador, lo cual es un error.
Además este aspecto cobra mayor importancia que otros años, ya que el año pasado muchas personas estuvieron en ERTE y, en ese caso, el SEPE cuenta como un pagador más.
Es importante señalar dos ideas básicas del funcionamiento del IRPF:
- Es unimpuesto progresivoque grava la suma total de los ingresos en función de una escala de porcentajes, de modo que, si la suma total es la misma, da igual si estos ingresos proceden de 1, 2 o 3 pagadores.
- En base a los ingresos y las circunstancias personales, todos los contribuyentes soportamos mensualmente en nuestras nóminas unas retenciones como adelantos de lo que nos corresponderá pagar después por IRPF. Estas retenciones soportadas se restan posteriormente en la declaración, de modo que no se paga doblemente por los mismos ingresos.
Con 2 o más pagadores, las diferencias son:
1. Obligación de presentar declaración:
- 1 pagador: Cuando los rendimientos del trabajo son + 22.000€.
- 2 o más pagadores: Cuando los rendimientos del trabajo son +14.000€, si el 2º o sucesivos suman +1.500€.
2.Retenciones: El SEPE no retiene o retiene muy poco, por lo que, como no se ha retenido, no ha habido adelantos y se debe soportar todo el impuesto al final.
Por tanto, NO ES CIERTO que con dos pagadores se paga más, sino que la obligación de declarar surge desde los 14.000€ y se abona al final lo que no se ha soportado anteriormente.
A pesar de que esto es bastante sencillo, para muchas personas puede llegar a ser un dolor de cabeza. Es por ello por lo que recomendamos que busques asesoría en Benidorm, La Nucia o La Marina Baixa para que cuentes con el respaldo de los mejores contables y especialistas en materia tributaria de toda España.
